¿Qué os motivó a fundar una editorial independiente en una región como Castilla y León, y cuál ha sido el mayor desafío hasta ahora?
León es una provincia con un poso literario, sobre todo poético, muy profundo. Aquí han nacido grandes autores y movimientos literarios que han dejado una huella imborrable en la cultura, pero sentimos que aún hay muchas voces y sensibilidades por descubrir y compartir.
Mariposa Ediciones nace precisamente de esa idea: dar al lector obras que conecten con las raíces, con nuestra tierra y su riqueza cultural, pero que al mismo tiempo dialoguen con el mundo. Queremos ser un puente entre lo local y lo universal, una editorial que cuide cada detalle, desde la selección de los textos hasta su diseño, para que cada libro sea una experiencia única.
El mayor desafío ha sido demostrar que desde una editorial independiente y arraigada en una provincia como León podemos tener impacto, relevancia y proyección, más aún teniendo en cuenta que mayoritariamente publicamos poesía. Competir en un mercado centralizado, en el que las grandes urbes concentran la mayoría de la atención, ha sido un reto, pero también nos ha permitido diferenciarnos. Nos motiva seguir apostando por la calidad, la cercanía y el amor por los libros como herramienta para conectar con lectores que valoran las historias auténticas y cuidadas.
¿Cómo seleccionáis a los autores y las obras que formarán parte de vuestro catálogo? ¿Qué características buscáis en ellos?
Una de nuestras colecciones más emblemáticas, "Especímenes Interesantes y Desconocidos de la Poética Ibérica", bien puede entenderse como una declaración de intenciones. Con ella queremos dar voz a autores y obras que, aunque quizá no sean los más conocidos dentro del panorama poético, tienen mucho que aportar por su originalidad, profundidad y frescura.
Esta colección representa nuestro compromiso con la exploración y la reivindicación de esas joyas escondidas de la poesía ibérica, creando un espacio para que las voces menos convencionales o más arriesgadas encuentren a su lector. Es una invitación a descubrir nuevos caminos en la poesía, a experimentar con miradas distintas y a sorprendernos con lo inesperado.
Además, refleja nuestro espíritu como editorial: buscar lo singular, lo auténtico y lo que puede marcar una diferencia, no solo en el mundo literario, sino también en quienes leen nuestras obras. En cada título de esta colección late nuestra pasión por la poesía como un territorio infinito de descubrimiento y conexión.
¿Qué impacto creéis que tiene vuestro trabajo en la difusión de la cultura y la literatura local?
Creemos que nuestro trabajo tiene un impacto profundo en la difusión de la cultura y la literatura local, tanto a través de los libros que publicamos como de las iniciativas que organizamos. Desde Mariposa Ediciones nos esforzamos por conectar nuestra rica tradición literaria con el presente, no solo llevando las voces de nuestra tierra más allá de nuestras fronteras, sino también devolviendo la literatura a su entorno natural: los pueblos, las comunidades y las personas que la inspiran.
La creación del Premio Nacional Coronio de Poesía, que celebramos cada 15 de agosto en Sopeña de Curueño, es una muestra de nuestro compromiso por poner en valor el talento poético en un marco que reivindica nuestra identidad local. A esto se suman los recitales y presentaciones que realizamos en los pueblos de la provincia, llevando la poesía y la literatura directamente a las personas, así como los talleres de escritura online y nuestro plan de fomento lector, que buscan generar espacios de creación, aprendizaje y disfrute literario.
Además, promovemos la cultura literaria a través de iniciativas como el festival EL FINDE los libros, donde damos protagonismo a obras de carácter local en un entorno de celebración y encuentro. Todo esto complementa nuestro objetivo editorial: demostrar que desde lo local se pueden contar historias universales, fortaleciendo el vínculo entre las raíces y el mundo, y acercando la literatura a todas las generaciones.
En un mercado dominado por grandes editoriales, ¿cómo lográis destacar y conectar con vuestros lectores?
Además de llevar la literatura a lugares inesperados, como bares, bibliotecas o locales de ropa, también destacamos por el diseño tan personal y único de nuestras obras. Nuestros libros no son simplemente mercancía; tienen alma, y ese alma se refleja en cada detalle, desde las palabras hasta las ilustraciones y la edición. Queremos que cada libro sea una experiencia tangible, algo que el lector no solo lea, sino que abrace con las manos y con el corazón.
Este resultado es posible gracias al talento y dedicación de nuestro equipo de edición, ilustradores y diseñadores, como Lolo y Laia Redondo y Noelia García, quienes aportan su creatividad y sensibilidad para que cada obra sea única. Creemos que la diferencia está en cuidar cada aspecto, transformando un libro en un objeto que conecta con el lector de forma profunda y memorable. Es esa atención al detalle, esa pasión por crear algo con alma, lo que realmente nos define como editorial.
¿Qué papel juega la comunidad en vuestro modelo editorial, y cómo fomentáis la interacción entre autores, lectores y la propia editorial?
La comunidad que rodea a Mariposa Ediciones es, en esencia, como una gran familia. Autores, lectores, alumnos de nuestra escuela de escritores y el público que asiste a nuestros eventos forman parte de un tejido vivo y dinámico, donde cada persona aporta algo único. No se trata solo de publicar libros, sino de construir relaciones profundas basadas en la pasión compartida por la literatura y la cultura.
En este modelo, los límites entre editorial, autor y lector se desdibujan. Celebramos juntos los logros, aprendemos de los desafíos y compartimos momentos que van mucho más allá de las páginas. Esta cercanía y calidez son el alma de Mariposa Ediciones, y creemos que son la clave para que nuestro trabajo resuene en quienes nos acompañan.
La literatura no solo conecta palabras; conecta personas, y en ese encuentro constante encontramos nuestra mayor inspiración.
Mirando al futuro, ¿qué proyectos o iniciativas tenéis planeados para seguir fortaleciendo la literatura contemporánea en la región?
Mirando al futuro, uno de nuestros grandes retos es retomar nuestra colección de poesía infantil. Aunque es costosa en cuanto a producción, creemos firmemente en su valor y en la importancia de ofrecer a los más pequeños libros que los acerquen a la magia de la poesía. Muchos niños que participan en nuestros talleres infantiles nos inspiran con su entusiasmo y curiosidad, y queremos completar esta colección para que puedan llevarse a casa obras que enciendan su imaginación y les abran las puertas al mundo literario.
Asimismo, planeamos acercarnos al sector juvenil con un par de publicaciones al año, adaptadas a sus intereses pero sin perder nuestro sello de calidad y sensibilidad. Queremos que estos libros sean un puente hacia el disfrute de la lectura y la reflexión, al tiempo que expandimos nuestro catálogo con propuestas frescas y actuales.
Por supuesto, no olvidamos nuestras raíces poéticas, que seguirán siendo el eje de nuestro trabajo. Desde que abrimos en 2019, hemos crecido poco a poco, como una mariposa que despliega sus alas con cuidado, y nuestro objetivo principal sigue siendo mantener un vuelo constante y sostenido. Lo importante, de momento, es seguir avanzando, cuidando cada detalle y manteniendo viva nuestra pasión por la literatura.